¿Buscas un taburete de ducha? En este artículo de nuestro blog sobre mobiliario para hostelería te vamos a ayudar a elegir el taburete de ducha que más te conviene.
¿Qué es un taburete de ducha?
Un taburete de ducha es un asiento para la ducha o para el baño. Consiste en un asiento sin respaldo resistente al agua con tres o cuatro patas. La mayoría tienen una superficie antideslizante en el asiento hecha de goma o caucho.

Los taburetes de ducha están hechos enteramente de plástico o madera. También hay taburetes con el asiento de plástico y las patas de aluminio. Algunos modelos llevan el asiento forrado de vinilo o polipiel.
La mayoría vienen en color blanco o gris, aunque también los hay de colores.
¿Para qué sirve un taburete de ducha?
El taburete de ducha sirve para sentarse mientras te duchas o bien mientras te lavas los pies y las piernas.
¿Quién necesita un taburete de ducha?
Los taburetes de ducha están indicados para personas que no pueden estar de pie durante un tiempo prolongado, por ejemplo, personas mayores y discapacitados.
También sirven te ayudan a mantener el equilibrio durante el tiempo que dure la ducha.
Tipos de taburetes para la ducha
- Taburete normal: La mayoría de los taburetes tienen un asiento y tres o cuatro patas. Las patas llevan unas gomas al final para que no se muevan.
- Taburete con altura regulable: Algunos modelos permiten variar la altura del asiento o de las patas. Esto último permite ajustar el taburete a una superficie inclinada.
- Taburete con asiento giratorio: Algunos taburetes tienen un asiento giratorio, lo que hace más fácil girar las caderas. Estos modelos son ideales para espacios muy pequeños.
- Taburetes plegable: Algunos modelos se pueden plegar. Si viajas con frecuencia, debes escoger un taburete de ducha plegable.
- Taburetes reforzados: Algunos modelos de taburete llevan un refuerzo para sostener grandes pesos.
- Taburetes con ventosas en las patas: algunos modelos llevan una ventosas al final de las patas para fijarlos al suelo.
- Taburetes con reposabrazos: Algunos modelos llevan reposabrazos para poder levantarse más fácilmente.
Criterios para elegir el taburete de ducha que más te conviene
Aquí tienes los criterios a tener en cuenta para elegir el taburete para la ducha:
- La altura del asiento: aunque la altura de la mayoría de los taburetes de ducha se puede ajustar, debes elegir uno que tenga un rango que se ajuste a tus necesidades.
- El ancho del asiento: Cuanto más ancho el asiento, mayor será la superficie para sentarte y más seguro el taburete. Lo ideal no es que el asiento sea sólo ancho, sino también que la base sea ancha para que el taburete no se incline fácilmente y te puedas caer.
- La estabilidad: En general, los modelos con cuatro patas son más estables que los que tienen sólo tres patas. Cuanto más ancha la base, más estable será el taburete. Cuánto más pesado, más estable.
- El acolchado del asiento: Un modelo con el asiento acolchado es más cómodo, especialmente si tienes la piel muy sensible o tienes yagas. El problema de los asientos acolchados es que con el tiempo se agrietan y se deterioran más fácilmente, por lo que si no los necesitas por razones médicas, es mejor elegir un modelo con el asiento normal.
Nuestra recomendación
Como normal, recomendamos un taburete de ducha que tenga la base lo más ancha posible y el asiento lo más grande para poder sentarse cómodamente. Esto hace que el asiento sea muy estable y más seguro de usar para personas con problemas de estabilidad.
Si tienes problemas de visión, elige un color vivo que contraste con el de la pared o la ducha.
Si te fatigas fácilmente, recomendamos un asiento con respaldo o una silla en lugar de un taburete. La silla es indicada para personas que no tienen fuerzas para mantenerse erguidos. También tienes la posibilidad de elegir un modelo instalado en la bañera.
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